Cuidar y mantener los muebles de tu casa ha de ser una de las tareas principales que debes de realizar. Los muebles pueden desgastarse y llegar a crear un aspecto mucho más envejecido de la casa donde se vive. Por eso, es vital conocer cuáles son las diferentes herramientas que existen para conseguirlo. Dos de ellas son el barnizado y el lacado, que poco tienen que ver entre ellas pero que son objeto de confusión. Por eso, en este artículo vamos a explicar las diferencias entre el barnizado y el lacado.
¿Qué es el barnizado?
Bien es cierto que es barniz es una combinación de aceite de secados, un diluyente o disolvente y una resina. Se utilizan en los muebles de madera para dar un mayor brillo y protección con el fin de que aparenten mucho más novedosos y perfectos que como se encontraban en un principio.
Esta, no tiene que utilizarse simplemente para crear una barrera que le proteja, sino que puede ser para realzar la belleza o simplemente “cubrirla” para cambiar el color o el brillo. Todas estas características se producen gracias a los materiales de los que está compuesto, que permiten mejorar el acabado de la madera y conseguir un color mucho más natural y cuidado. Además, consigue proteger el mueble de la suciedad que pueda haber en la zona.
Es una técnica que puede ser realizada por cualquiera, ya que es muy simple de aplicar. Simplemente se debe coger un pincel y realizar pinceladas por las zonas del mueble de madera que quieras mejorar o cambiar. No deja marcas muy distinguidas o visibles, por lo que si te equivocas puede no notarse.
Entre las ventajas que aporta, se encuentran:
- Facilita la limpieza y aumenta la durabilidad de las piezas
- La madera no absorbe la humedad
- Durabilidad
- Mejor acabado
¿Qué es el lacado?
Por otro lado, el lacado se caracteriza por ser una técnica de recubrimiento de la una superficie de madera con un líquido compuesto de esmalte-laca. Este producto, permite evaporar sus disolventes rápidamente para conseguir que la superficie del mueble se vea mucho más duradera y resistente. Por eso, no es tanto un material en sí, sino una forma de acabado.
El lacado permite conseguir diferentes colores gracias a la variedad de lacados. Además, permite dejar una sensación de mayor brillo y cuidado en los muebles, por lo que se le considera una técnica de gran valor.
Se aplica de forma muy sencilla. Se pulveriza por la zona que se quiere tratar hasta que se han creado las capas. Entre capa y capa, se debe dejar un tiempo de secado para garantizar que se impregna completamente. Después de este tratamiento sencillo, se debe realizar un lijado para conseguir una sensación de resistencia, brillante y liso.
Entre sus ventajas se encuentra:
- Se limpia muy bien
- Es muy duradero
- Es un material muy compacto
En Barnizados y Lacados queremos ayudarte a resolver todas tus dudas. Somos expertos en lacados, por lo que si tienes cualquier duda sobre este acabo puedes preguntarnos. Estaremos encantados de ayudarte.
